miércoles, 3 de agosto de 2011

Filos

Érase en un pueblito alejado e inhóspito, frío y gris, preso por la monotonía y el óseo forzado.

Pero un día, llegaron unas HADAS madrinas para intentar romper un supuesto hechizo, puesto por  un enemigo común llamado HEGEMONÍA; a ella le gusta oprimir, imponer, ocultar y callar todas las penurias a la que las personas son sometidas, por pensar distinto o no tener las mismas oportunidades.
         
 Las HADAS eran muchas y variadas y llenas de bondad se dispusieron trabajar en equipo, para cambiar esta realidad.
 Al principio no contaban con información suficiente para preparar la poción y romper con el conjuro, pero fueron perseverantes y probaron de varias maneras.
 Lo primero fue confirmar si los pueblerinos se encontraban dispuestos a ser liberados; descubrieron  que seria un trabajo duro, porque, algunos de temperamento hostil, llegaron a poner en jaque la paciencia de una de las HADAS; ella desde el comienzo sabia que no seria fácil, el hechizo realizado por la HEGEMONÍA era muy poderoso, producía acostumbramiento y naturalización de los tormentos psicofísicos aplicados.
Otra de ellas, experta en brindar contención, apoyó a las otras HADAS agotadas en sus fuerzas y ánimos decaídos, alentando e incluso relevando en tareas a otra asignada; era un verdadero equipo de trabajo.
      
 
  En un momento dado se preguntaron:
 ¿?¿?¿?¿?¿?¿?¿?¿?¿??¿?¿?
 ¿Cuál seria la solución del problema?
 ¿Solo abrir los candados?
 Abrir los candados seria muy fácil.
n  dijo una.
n   --Pero: ¿imagínatelos sueltos? --dijo otra.
n   --Volverían a lo mismo – remato la tercera.




 Tenemos que ayudarlos a prepararse para cuando el conjuro se rompa.

¿Y si HEGEMONÍA preparo magia inversa y cuando intentamos romper las barreras quedamos atrapadas?

 Mientras preparamos la receta, debemos aprender de ellos, no hay nadie que conozca mejor como oprime hegemonía en este pueblo mejor que ellos.
  En un principio el pueblo estaba movilizado con la presencia de las HADAS, un tanto admirado con su belleza, pero a la vez con cierta desconfianza con sus preguntas y maneras de encarar algunos temas.
        La población asistente era un tanto inestable, solo unos pocos realmente valoraban el esfuerzo y eran lo mas constante que HEGEMONÍA dejaba ser ante cada encuentro.
        Lo primero fue aprender a escucharse.
        Se implementaron pautas de trabajo, dinámicas de reconocimiento de nombres, para fortalecer el estimulo que se produce al ser llamado por el propio, comunicarnos mejor cada vez que fuese necesario, para buscarse, llamarse o presentarse.
        Elevación de la autoestima, comprendiendo que cada uno es único, que no hay una sola verdad y que hay distintos saberes, cada uno aporta lo suyo construyendo un saber colectivo.
        Relevamiento de sueños, para conocer anhelos, utopías y por que no los mas profundos sentimientos de cada uno.
        Charlas de gustos en común, música, deportes, estudios, salud, política; para conocernos mejor y entrar en confianza.
        También le llego el turno a los valores, puesto que en ese pueblo, a raíz de la imposibilidad de ejercer todos los derechos de pleno por el bloqueo controlado por el mal, de una manera tan arbitraria, se encuentran reprimidos algunos y en desuso otros.
       
  Fueron diversas las formas en que las HADAS se dieron a conocer y muchos los modos en que intentaron enseñar la manera de derrocar a la HEGEMONÍA, incluso que cada uno podía hacerlo a su manera, pero jamás detenerse o darse por vencido.

   Ellas contaban con unas pequeñas alitas en sus espaldas, que les posibilitaban entrar y salir del pueblo, siempre y cuando con aviso previo para que HEGEMONÍA saque parte del escudo que rodea el pueblo y así poder ingresar, ya que, tanto el bien como el mal, forman parte del “Tratado Cósmico” un ente interestelar que en uno de sus artículos reprende a quien prohíba asistencia a pobres y ausentes; pero así y todo HEGEMONÍA se hacia la distraída con sus responsabilidades (por influencia de las siete espadas, que corresponden a los siete pecados capitales) e imposibilitando o dilatando los ingresos de una manera desgastante, con la intención de que se cansen y se marchen.
        En uno de esos encuentros, luego de esperar bajo la lluvia más de  una hora, asta que se desactive el escudo, surgió el debate acerca de que era HEGEMONÍA, quien la conducía, que le daba su poder. Un viejo residente del pueblo afirmo que eran personas oscuras, muy poderosas que vivían en las periferias del pueblo y mantenían diálogo e influencia sobre ella, él asegura que ellos la controlan y contribuyen a su mayor fuente de poder, “EL DISCURSO”; mediante empleados, organiza patrullajes de control y observación del modo de vida para evitar todo tipo de organización interna, ya sea laboral, intelectual o social sin aviso, y bajo su estricta reglamentación. Otra función de los empleados, consistía en hacer circular  información errónea acerca, generando una terrible y estresante incertidumbre acerca de  la estabilidad del pueblo, una verdadera maquina macabra.
Luego de un año duro de incesante trabajo, con un promedio de dos encuentros semanales, las hadas deciden hacerles un regalo al grupo colaborador en la preparación de la pócima mágica que los libraría del mal a todos; ellas les vendaron sus ojos, y en fila los hicieron pasar a un cuarto con música suave, en ella se podían percibir los sonidos del agua cayendo, pájaros piando, el viento soplando árboles imaginariamente gigantes, todo fue muy armónico,  de pronto cual canto de una sirena, una comenzó a recitar los mas profundos  anhelos y los mas sinceros agradecimientos, todas se expresaron, todos escuchamos (eso era filantropía), proyectaron un video de su grupo de trabajo en el exterior del pueblo, lo que manifestaba que no estaban solas, había una organización muy firme en sus convicciones, eran muchos, querían sumarnos. Repetían lo importante que es cada uno y que no habría recetas mágicas, que aun con obstáculos físicos propuestos por HEGEMONÍA, muchas beses nosotros mismos somos nuestro Mentor.   


A: Randone Omar     

1 comentario:

  1. un maestro mani!!abajo la hegemonia!!que las hadas las conozco y se puede!!gracias por estar en el momento indicado

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